Argentina y Brasil defiinen el martes la supremacía del básquetbol sudamericano y una chance de avanzar en los cuartos de final del mundial de Turquía.
Los dos equipos son conscientes de la importancia y de lo que está en juego en ese partido y se preparan para una batalla durisima, si el marcador permanece igualado hasta el último parcial. En Brasil, la obsesión es frenar a Luis Scola. En Argentina, la preocupación son la dupla Marcelo Huertas-Tiago Splitter, sin olvidar a Leandro Barbosa.
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